Es normal que conozcamos la trayectoria de grandes magos, pero ocurre que en general, solo se conoce su carrera artística a partir del momento en que se hacen famosos.
Muchas veces hay una nebulosa en la previa a su popularidad, en sus inicios, que bien queda en el olvido, se desconocen detalles, o sencillamente no hay pruebas fehacientes y sólidas sobre sus primeros pasos.
El Gran Raymond por ejemplo, afirmaba que sus tours mundiales eran uno o dos mas que los reales, Harry Kellar a su vez, decía haber actuado ante reyes o personalidades importantes, pero en algunos de esos casos, nunca se consiguieron detalles, programas, publicaciones o lo que fuera, que certificara tales aseveraciones, y en ocasiones, las fechas de tales presentaciones, no coincidían con las actividades de los citados monarcas, porque se encontraban en otras ciudades.
El hecho es que la historia de la magia, se ha quedado en muchos casos, con solo una parte de la vida de nuestros personajes.
Presento aquí, una anécdota de los inicios de uno de los magos mas reconocidos.
No es la intención de este escrito empañar y aún menos menospreciar la habilidad, creatividad y trabajo mágico del artista en cuestión.
Solo mencionar que los famosos también han pasado por circunstancias no demasiado agradables, de las que poco se ha hecho eco la literatura mágica.
Vamos pues a los personajes
Charles De Vere y Okita
Herbert Shakespeare Gardiner Williams nació en Londres en septiembre de 1843, y tomó el nombre de Charles De Vere para su trabajo en la magia.
Fue un famoso dealer, que se estableció en Francia, muriendo en ese país en 1931 a la edad de 88 años.
Por otra parte, su mujer, la inglesa Julia Ferret “Okita”, había nacido en 1852.
Okita presentaba un espectáculo llamado “Recreaciones japonesas”.
Se trataba de un excelente acto de magia de estilo japonés, con el cual debutó en Bruselas en 1877 .
Okita murió en Paris en 1916.
Tobías Bamberg “Okito”
Nació en holanda en 1875, es decir dos años antes del debut de Okita.
Había hecho su primera presentación a los 13 años junto con su padre, ante la reina Wilhelmina de Holanda.
En 1896, y ya con el nombre de Okito, viajó con su acto de magia china a través de toda Europa, terminando el tour en 1904.
En 1909 se decía que Okito (33 años) había viajado por Europa, Sudáfrica, Sudamérica, India, etc.
Desconozco lo de Sudáfrica e India, pero no he podido encontrar noticias de la visita de Okito a Sudamérica en la época mencionada.
Okito y Polising
La primera vez que encuentro el nombre de Okito en la bibliografía, se lo presenta como mago alemán, realizando un acto de magia japonés.
Si bien su rutina recibía comentarios favorables, era algo criticado, debido a que su producción de tazones y de un chico, era muy similar al estilo de Chung Ling Soo.
El número se anunciaba como “Okito y Polising”, y ambos se presentaron en Francia en salas de vaudeville, pasando luego a Inglaterra.
Es justamente en Londres, cuando en septiembre de 1902, ambos artistas aparecen en los titulares de varios semanarios londinenses, pero no en espectáculos, sino en el rubro noticias de policía.
Resulta que durante una de sus rutinas, falló la pistola con la que debía realizarse un disparo y el juego se arruinó.
Okito culpó al asistente, y al finalizar el acto, ya en camarines, golpeó duramente en la cabeza a Polising, a tal punto que este debió ser atendido por los médicos.
Intervino la policía, Okito fue acusado de asalto y agresión, y terminó en la cárcel.
Los periódicos reportaron no solo el hecho mencionado, sino otras crueldades a las que era sometido el tal Polising.
A partir de los partes policiales, se supo que Okito, se llamaba Tobías Bamberg, y era descendiente de una familia de magos holandeses.
A su vez Polising, un enano de 17 años, se llamaba Leonard Franke, y era hijo de un sastre.
Okito recibía 40 libras por semana de actuación, de los cuales se reservaba 39 libras y 16 chelines, y solo entregaba la mísera suma de 4 chelines al sufrido enano.
Aunque para no cargar tantas culpas a Okito, debe mencionarse que Tobías se ocupaba del alojamiento y comida del muchacho.
A partir de esa noticia, comenzaron los golpes duros de la prensa contra Okito, acusándolo de haber tomado el nombre de Okita, aunque en genero masculino, y también de copiar el acto de Chung Ling Soo.
Considerando que Chung a su vez había tomado las rutinas de Ching Ling Foo, podríamos aplicar aquello que “quien roba a un ladrón tiene 100 años de perdón”, pero lo cierto que no le fue aplicado a Okito tal proverbio.
Pero el asunto no terminó allí, porque el padre de Polising, declaró que estaba dispuesto a “entregar” a su hijo a Okito, hasta tanto se terminaran los compromisos asumidos con el teatro.
De Vere, desde Paris, aprovecho la ocasión y se encargó de difundir la noticia en todos los magazines mágicos habidos y por haber, imputando a Okito no solo por copiar el nombre de su mujer Okita, sino también de tomar las rutinas de su show, comentando en forma mordaz, que Okito también podría emular el acto de Houidini, para tratar de escaparse de la cárcel.
Los problemas deben haberse solucionado, porque he encontrado al dúo trabajando juntos hasta enero de 1903.
Okito continuaría luego su carrera ascendente hasta convertirse en uno de los grandes de la magia.
15 marzo 2010
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